¿Cómo captar clientes potenciales en Facebook Ads?
January 2022
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Actualmente, el NFT se ha convertido en uno de los acrónimos más buscados y populares de las redes sociales e Internet. Lo llamativo del asunto es que ha arribado con mucha fuerza al mundo del arte, a tal punto, que podría cambiar diversos preceptos que están establecidos canónicamente. Basta con mencionar que Mike Winkelmann (Beeple), un conocido artista digital y diseñador gráfico, vendió en una subasta en línea una imagen por 69,3 millones de dólares.
Se trata de un hecho que ha sacudido al sector artístico, ya que fue la primera venta de arte digital para la casa de subastas Christie’s. Lo que quiere decir que jamás hubo una copia física de la obra, todo se ha efectuado por medio de un ordenador y fue netamente virtual. Esto ha sido un boom sin precedentes en el mercado, y a pesar de que el NFT no es nuevo, lo cierto es que está llegando a más personas, creadores, artistas, comerciantes, etc.
El NFT hace posible que una gran comunidad de individuos pueda monetizar su trabajo en el basto universo de las criptomonedas. Ahora bien, si no sabes qué es un NFT, no te preocupes, en breve esclareceremos tus dudas para que no haya cabos sueltos.
NFT significa “non fungible token”, “no fungible” quiere decir que no se puede cambiar por algo de valor similar. Se trata de un token que es único en su clase, así que es irremplazable. Gracias a que es un elemento singular, permite que se puedan tokenizar cosas como el arte, objetos de colección y bienes raíces.
Un punto clave del NFT es que solo puede tener un propietario a la vez que estará protegido por la cadena de bloques (Blockchain) de Ethereum. De esta manera es imposible que una persona altere el registro de propiedad del token o pueda “copiar y pegar” un nuevo NFT para que exista.
Así pues, los NFTs son un medio que permite adquirir bienes digitales, expande el mercado a otros horizontes. Por ejemplo, un fotógrafo puede subir su imagen a Internet y, después de cumplir con varios pasos de verificación, estará en la capacidad de vender o subastar la foto sin ningún problema. Además, también tiene la posibilidad de elegir la manera en que desea recibir el pago, ya sea aceptando regalías en NFT, porcentajes determinados de tokens, etc., el abanico de posibilidades es amplio.
Hay varias maneras de comprar un NFT, la primera de ellas consiste en poseer criptomonedas que te permitan adquirir el NFT que deseas dentro del Blockchain donde ha sido creado. Pero también hay una forma más sencilla que actualmente está teniendo un gran auge. Los creadores del NFT pueden vender el token y recibir el pago en una cuenta bancaria. Esto quiere decir que existe la posibilidad de hacer la compra con tu tarjeta de crédito, no es necesario que tengas criptomonedas.
Ahora mismo hay muchos mercados que ofrecen NFT por doquier, la gran mayoría son plataformas rápidas, fáciles de utilizar y seguras. Las que tienen más demanda debido al buen servicio que ofrecen son OpenSea y KnowOrigin. Allí puedes ofertar o adquirir los NFTs en el precio establecido para que puedas hacerte con un bien digital.
Lo primero que debes saber es que el criptoarte, es decir, el arte digital, descansa plenamente en los NFTs. El valor de este tipo de expresión se encuentra en Blockchain debido a que se deshace de los intermediarios y es capaz de confirmar los orígenes y la autoría de la obra sin costes adicionales.
El beneficio del criptoarte reside en que abre las puertas a muchos artistas que antes no tenían acceso a las galerías de arte, es un medio de entrada y evolución para una gran cantidad de individuos. Los criptoartistas ahora pueden contar con un lugar para exhibir sus obras y venderlas en tiempo real sin tener que cumplir con un papeleo interminable y sin tener que pagarle a terceros para hacer los trámites.
Un ejemplo claro de lo expuesto anteriormente es Javier Arrés, un criptoartista español que pudo saltar a la fama en 2021 gracias a la popularidad de sus creaciones NFT. El mismo artista dio a conocer que en el pasado sus obras en muchas ocasiones ni siquiera llegaban a presentarse en una galería. Ahora la última colección que expuso superó el medio millón de dólares en ventas. Claramente, el criptoarte es más que una simple tendencia debido a que representa una oportunidad para muchos artistas que viven en el anonimato.
Las plataformas con más demanda son Super Rare y Makersplace, allí los criptoartistas presentan sus obras. Un punto importante es que, al tratarse de un mercado NFT, el uso de criptomonedas es obligatorio en esos sistemas, además, los criptoactivos deben ser extraídos por Ethereum.
Algo increíble ha sido el crecimiento de las plataformas, anteriormente Markesplace siempre estaba en la búsqueda de nuevos artistas, pero ahora se registran entre 15000 y 20000 criptoartistas por día, se trata de un crecimiento exponencial y solo es el comienzo.
En este nuevo espacio del NFT y el arte aún existen muchos escépticos, pero lo cierto es que un fotógrafo puede ganar hasta 20000 USD vendiendo una sola imagen NFT. Hay una gran cantidad de casos, uno de ellos es Kate Woodman, la criptoartista vendió su imagen titulada “Always Coca-Cola” por 11888 ETH (21321 USD). Esto corrobora de manera palpable el potencial que ofrece el mundo NFT para los fotógrafos, sobre todo si cuentan con una comunidad de seguidores.
Un aspecto esclarecedor es que, ciertamente, las criptomonedas han llegado para quedarse y por este motivo muchos artistas han elegido formar parte del NFT. La principal razón de esto es que la obra y el artista pueden monetizar fácilmente, sin obstáculos molestos de por medio. Hay un gran mercado para la fotografía y las imágenes, así que, en vez de publicar el contenido en Instagram y obtener miles de “Me gusta”, ya pueden transformar su trabajo en dinero.
Puede que este sea un problema para la gran mayoría de fotógrafos, ya que no existe un método a seguir ni un cálculo exacto, al fin y al cabo se trata de arte. Actualmente, son los mismos artistas los que establecen el precio de la obra que van a vender. A pesar de ello, la mecánica es muy simple, mientras más demanda tenga el criptoartista, mayor será el coste de la imagen.
Puede que parezca un tema complicado, pero resulta más sencillo de lo que aparenta. En primer lugar, el propietario de una obra original siempre será el dueño de la misma sin importar que venda un NFT de la pieza. El NFT no es más que una copia digital de la creación original del artista, lo que quiere decir que la mente detrás de la obra en todo momento tendrá el control sobre cómo se licencia su foto, GIF, dibujo, etc.
Claramente, el concepto de un NFT no es algo nuevo, pero el mercado de estos se está expandiendo a un ritmo vertiginoso. Es por ello que las plataformas que trabajan con NFT están elaborando sus propias reglas acerca de los derechos de autor y las licencias. El artista debe tener muy claro que jamás estará vendiendo el copyright de su obra, pero aún queda mucho por recorrer y formalizar.
En conclusión, el fotógrafo puede vender un NFT de su imagen más popular y tiene el derecho de seguir exponiendo su foto en las redes sociales sin problemas. Igualmente, puede licenciarla a empresas, vender impresiones y más, no hay límites para que haga con su creación lo que desee.
El problema más grande que debe enfrentar el artista es la compresión correcta del mundo de las criptomonedas para que pueda trabajar con los NFTs sin problemas. Para poder comerciar sin riesgos tiene que moverse en el mundo de las criptodivisas hábilmente.
Además de ello, tendrá que hacerle frente a famosos que ya se encuentran en este mercado y que acaparan la atención de millones de personas. Por ejemplo, la cantante Grimes vendió sus creaciones por seis millones de dólares y un simple GIF de Lebron James fue saldado en 200.000 USD.
Esos dos factores en un principio podrían representar un problema, pero es algo que el artista aprenderá a solventar con el tiempo. Igualmente, la inmensa comunidad de criptoartistas cree firmemente que los pequeños creadores son los que obtendrán mayor éxito con el tiempo, parece que todo es cuestión de paciencia y constancia.